Autocuidado en la preparación y manejo de citostáticos, recomendaciones
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Resumen
“La práctica de enfermería se basa en el cuidado de una persona, de una familia o de una comunidad; esta práctica es mucho más que el cumplir una serie de tareas, requiere de la reflexión para atender las necesidades del usuario; engloba un cuidado individualizado y la integración de habilidades terapéuticas” (Kérouac, 2005).
Tomando en cuenta lo anterior y considerando que el personal de enfermería ofrece cuidado de calidad, es importante que lleve a cabo acciones de autocuidado sobre todo cuando manipula fármacos citostáticos. Al respecto, Dorothea E. Orem define al autocuidado como:
“una actividad aprendida por los individuos orientados hacia un objetivo. Es una conducta que existe en situaciones concretas de la vida dirigida por las personas hacia sí mismas o hacia el entorno para regular los factores que afectan a su propio desarrollo y funcionamiento en beneficio de su vida, su salud o su bienestar” (2005, p. 15).
Orem (1993), refiere que la idea central de la teoría del autocuidado se basa en que las personas maduras y en proceso de maduración realizan acciones y secuencias de acciones aprendidas y dirigidas hacia sí mismas, hacia características ambientales conocidas o supuestas y así cubrir los requisitos identificados para el control de factores que promuevan, que afecten adversamente o que interfieran en la regulación de su propio funcionamiento y/o desarrollo y que de esta manera, contribuyan en la continuación de la vida, al automantenimiento de la salud y al bienestar personal; en este sentido, el personal de enfermería en contacto con citostáticos, debe realizar acciones de autocuidado para minimizar los riesgos a los que se encuentra expuesto por el contacto con estas sustancias.
El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS, s.f.), define al citostático como: “Aquella sustancia capaz de inhibir o impedir la evolución de la neoplasia, restringiendo la maduración y proliferación de células malignas, actuando sobre fases específicas del ciclo celular; este mecanismo hace que, a su vez, sea por sí misma carcinógena, mutágena y/o teratógena”.